Ganador BIAM 2020.
La obra "Mañana niebla" de David Ortiz Gana la decimosexta edición de la BIAM. Se trata de una videocreación filmada en un bosque mesófilo de México en la que el artista explora conceptos como la identidad.
Del 7 de noviembre al 17 de enero de 2021.
Centro de Arte Lo Pati.
La obra de videocreación Mañana niebla, de David Ortiz (Alcoy, 1983) ha sido el proyecto ganador de la decimosexta edición de la Bienal de Arte Ciudad de Amposta, la BIAM 2020. El jurado lo ha escogido entre las quince obras seleccionadas en la edición de este año.
En la obra la voz interior de una flor habla desde un futuro en el que la idea de comunidad ha sido del todo desterrada. Un humano encuentra una fábula nahua sobre un tiempo pasado en el que la comunidad era una manera de vivir. La fábula cuenta que el último reducto de comunidad se encuentra escondido en el interior de la selva de niebla de montaña. Filmado en el bosque mesófilo de la Sierra Norte de Puebla, en México, Mañana niebla hace un recorrido entre tiempos y espacios nebulosos. El proyecto nace de varias estancias sucesivas del artista en la comunidad nahua de Cuetzalan (julio de 2017, enero de 2018, febrero de 2019) y de un interés por el influjo que la visita de unas antropólogas tuvo en la su lengua y su escritura (centrada en la fábula y el poema), así como en el trabajo del antropólogo Eduardo Kohn y su idea de una antropología más allá de la esfera humana.
Paralelamente, el jurado integrado por Marc Navarro (comisario independiente), Hiuwai Chu (conservadora de exposiciones del MACBA), Oier Etxeberria (responsable área de arte contemporáneo de Tabakalera - San Sebastián), Rosa Leó (comisaria y directora de The Green Parrot - Barcelona) y Miguel Ángel Sánchez (director de ADN Galería), también ha hecho una mención especial a la instalación Mundus vult decipi, de Cristina Moreno (Zaragoza, 1985) y Laia Ventayol (Artà -Mallorca, 1984).
Esta instalación deriva de una investigación artística de ambas artistas en torno a la medicina romántica de comienzos del siglo XIX y de la teoría del Magnetismo animal del médico alemán Franz Anton Mesmer. La pieza que exponen a la BIAM es una instalación-fuente con sonidos binaurales, objetos encontrados y aguas sanadoras, inspirada en el baquet creado por Mesmer y la han adaptado a la realidad del territorio incluyendo elementos del mar del Ebro tales como artes de pesca de Sant Carles de la Rápita o restos de crustáceos.
Compartir en